Diseños de cine

Leo en el Architetural Digest de febrero (http://www.architecturaldigest.com/) un reportaje dedicado a la redecoracion de una casa diseñada Paul R. Williams (1894-1980), arquitecto que desarrollo su carrera en Los Ángeles y que diseño un montón de casas en Hollywood.



Tuvo clientes famosisimos como Frank Sinatra, Lucille Ball, Tyrone Power o Barbara Stanwyck.


Esta es la casa de un ricachon de la Chrysler , alrededor de los años 40.

Entre otras cosas que hizo o que contribuyo a realizar, están el Beverly Hills Hotel, el Shrine Auditorium (donde se entregan los Oscars) y el edificio de las Naciones Unidas en París.


The Shrine Auditorium.

Es curioso que Mister Paul, primer arquitecto afroamericano de prestigio, trabajo muchas veces en parcelas cuyas escrituras impedian ser adquiridas por negros. Muy fuerte.


El Theme Building en el aeropuerto de Los Angeles, con el delante.

Su estilo es Tudor, es Regencia, es Mediterraneo, es jardin y fachada unidos, es elegante y sofisticado.


Paisle Residence, 1934, Bel Air.
Esta me podria valer par el futuro.

Por cierto, que el numero de la revista es interesantisimo, con un reportaje sobre el antes y después de algunas casas (los antes y después funcionan siempre) y la reforma de una casa en Central Park con metros cuadrados para jugar un partido de béisbol.

Inspiracion para 2010

Estos señores de 1910.



Y luego los hay que hoy por hoy, se llaman a si mismos modernos.
Pffff.

Biopics de moda

Hoy me pongo un poco más seria de lo habitual para hablar de Sundance.


El jueves empezó la vigésima edición del festival, que llega con los dos últimos biopics (género que adoro y venero) recién salidos de Hollywood y que ya se han proyectado en Utah.

El Festival de Sundance, meca del cine independiente, creado por el actor Robert Redford para promover el cine fuera de las colinas de Hollywood, llega este año con dos sorpresas. Para los amantes de las biografías aparecen dos títulos protagonizados por actores jóvenes y guapos, paradójicamente, muy Hollywood style, James Franco y Kirsten Stewart.


Howl (Aullido), que todavía no cuenta con distribuidor, narra el proceso que tuvo que pasar Allen Ginsberg tras la publicación del poema de mismo nombre.


Con producción de Gus Van Sant y dirigida y escrita por Rob Epstein y Jeffrey Friedman cuenta con Franco como estrella principal, que se pone en la piel del poeta en una curiosa elección de casting, que ya veremos si funciona.




Lo que ocurre, basicamente, es que Franco es guapisimo y Ginsberg no era precisamente un Adonis.


Franco de nuevo.




Allen.
Aunque para ser justos, sin barba es otra cosa.


En el reparto también están Mary Louise Parker y Jeff Daniels. Y el actor de moda, Jon Hamm , el carismático Don Draper de la serie de Mad Men, que aparece como el abogado del autor.




Algunos privilegiados tuvieron la suerte de poder echarle un vistazo a la película el martes pasado antes del festival, en un pase especial en el hotel Crosby de Nueva York.

Entre ellos, Bjork, Alicia Silverstone (¡!), Kim Gordon, Brooke Shields o Michael Stipe y un James Franco contentísimo y exultante, pues esta película se ha convertido en algo muy personal para él, como declaro después del pase.


Aqui comprobamos de nuevo la belleza y campechaneria de James.


Aqui, the magnificent Kim.


The Runaways, el otro biopic con súper estrella



The Runaways, sobre el grupo musical del mismo nombre, es otro biopic que presumiblemente va a dar bastante que hablar.






Dos opciones para forrar la carpeta.
Las Shannon Doherty del 2010.



La película, que va a poner de moda los 70, las plataformas, el flequillo con raya en medio y las riot girls, va a disparar a una nueva cumbre de fama y popularidad a su protagonista, la crepusculina Kirsten Stewart, que hasta ha aprendido a tocar la guitarra para darle mas credibilidad a su rol como Joan Jett, la carismática cantante del grupo.



Aqui las Runaways originales. Joan es la morena.




Aqui la Stewart as Joan.


La coprotagonista es Dakota Fanning, favorecidísima y mayorcisima de rubia oxigenada.






Me apuesto la Blackberry a que esta imagen va a dar la vuelta al mundo.


Dirigida y escrita por Floria Sigismondi, conocida por sus videos musicales y su especial uso de la cámara, parece que la película promete bastante. En los corrillos posteriores al screening del domingo parece que se hablaban maravillas, y en la fiesta de después, todo eran alabanzas.


Esta es Floria + acompañante.



Joan, Dakota y Kirsten on stage, despues de la actuacion de la primera.
Hay que ver lo que le gustan las capuchas a esta chica.
(A veces no se si es ella o si es uno de sus personajes. Otra que se mimetiza tanto que uno llega a veces a pensar que no tuviese personalidad...Lo cual no quita para que me encante. Soy muy fan.)


En fin, la Stewart además hace doblete, ya que también forma parte del reparto de Welcome to the Rileys con James Gandolfini, donde interpreta a una bailarina de striptease a la que la vida le brinda una segunda oportunidad.


Hay que ver lo que trabajan algunas.
Y lo guapisisima que es la jodia.

Por otro lado, el festival quiere recuperar este año sus raíces, seleccionando las películas sin tener en cuenta tanto su potencial comercial (¿¿¿???) , tal y como comenzase su andadura, allá por 1978.

Cinéfilos del todo mundo estamos expectantes con las propuestas de este año, ya que, solo por nombrar un ejemplo de la importancia de este festival, de la edición del año pasado y si no me equivoco, salieron dos firmes candidatas a los Oscar de este, Precious y 500 días juntos.


Mas informacion, en http://festival.sundance.org/2010/






P.D. Una vez mas, perdon por el tema acentos. Al parecer finalmente es un virus...

Usa la fusta: Galliano para Dior alta costura

Ayer tuvo lugar el desfile de Dior alta costura en Paris, donde Galliano sacó su lado más Galliano a pasear, o mejor dicho, a cabalgar.




Amazonas del siglo XIX, extravagancia al servicio de la belleza y moda, mucha moda. Esto es solo una pequeña muestra.














El creador ha declarado que parte de su inspiración viene de Charles James, pionero diseñador británico que influyo al señor Dior para la confección del New Look, y de Millicent Rogers, coleccionista de su obra, rica americana, trendsetter e icono de moda de por aquel entonces.





Y que todo esto hizo click en su cabeza un día que de paseo con Anna Wintour en el que también se pasaron a echar un vistazo a los primeros esbozos de una exposición que tendrá lugar en primavera sobre la mujer americana. (Hay que ver los planes que tienen algunos).

Millicent era una mujer que “no sólo consumía estilo, sino que lo creaba” tal y como explican en la pagina web de su museo, en Taos, Nuevo Méjico.




Heredera de profesión, poseedora de un ojo envidiable, era además una mujer con gran sensibilidad humanitaria que lucho por los derechos de los indios, por proteger el arte nativo americano y que hasta quiso ser enterrada en una sábana de los Navajos.

Diseñadora y coleccionista de joyas, fue capaz de convencer al mismísimo Balenciaga de que le hiciera blusas de campesina (¡!).








Otro icono para la carpeta.
Y yo ya lo tengo clarísimo, de mayor quiero ser heredera, primogénita o descendienta, por ese orden.


Y para terminar, algunos detalles mas de la colección, que es impresionante.

El maquillaje es de ensueño, los botines me quitan el aliento y los tonos empolvados y los sombreros, lo mejor.

Un tipo serio y bien vestido

La ultima de los Coen (esta frase suena increíblemente pedante, pero es así) me deja un sabor de boca raro, no sé que pensar.
Hubo cosas que me gustaron y cosas que no... y sorpresa al ver que todo el mundo se MUERE DE LA RISA en el cine mientras una solo se carcajea en el minuto y medio de metraje que aparece este señor, al que a ver si de una vez, Hollywood le da un protagonista.



Simon Helberg como Howard Wolowitz en The Big Bang Theory.




Aquí en Studio 60 on the Sunset Strip (una joya de serie desperdiciada; hicieron una temporada y la audiencia estadounidense se la cargó.)


En Un tipo serio hace del rabino Scott, y como ya he dicho está brillante en su cortisimo papel. De hecho, todos los actores están de diez, el casting y el trabajo actoral son sobresalientes.



En todo caso, como aquí de lo que se habla es del estilo, ahora si que puedo decir sin temor a equivocarme que la película tiene un estilazo de nivel.

La acción transcurre en 1967 en el Medio Oeste americano(menos el inquietante prólogo- bastante jetilla pero genial, por cierto).
El protagonista es Larry Gopnik, es un tío muy correcto, profesor de física de una pequeña universidad






Un buen día, su mujer decide dejarle por un amigo común, un imbecil integral que va de espiritual por la vida, Sy Abelman.





Mientras tanto, su hermano Arthur, incapaz de valerse por si mismo duerme a su lado, en el sofá, su hijo esta en la típica fase adolescente descontrolado, y su hija, otro tanto de lo mismo, pero en más fea.






Y todo empieza a ir cada vez peor para el pobre Larry, que sólo quiere ser bueno.
Sin saber qué hacer, decide pedirle consejo a un rabino.
Y a otro, y a otro.
Y mientras, tanto, la vida pasa.



Una tal Mary Zophres es la diseñadora de vestuario.






Ha trabajado con los Coen nueve veces (en Fargo, El Gran Lebowski o Quemar después de leer, por ejemplo) también ha trabajado con los hermanos Farelli en sus tres primeras películas, y con Spielberg en Atrápame si puedes, trabajo por el que fue nominada a un premio BAFTA al mejor diseño de vestuario.





Catch me if you can, una delicia visual.


Mary investigó en el centro histórico de la sociedad judía del Medio Oeste (Jewish Historical Society of the Upper Midwest).
Al ser una sociedad mayoritariamente conservadora, pequeña y alejada de los focos de modernidad de por aquel entonces, la gente vestía como se vestía en los primeros sesenta, nada de hippies a la vista.





Le inspiraron las cocinas de esos años, esas de verde aguacate y naranja calabaza.

Y con eso, y los tonos más neutros de la primavera, se las arregló para construir su paleta cromática.




La mayoría del vestuario fue alquilado y otra parte adquirida en tiendas vintage.
La variedad le dio a Zophres la posibilidad de jugar con algunos personajes, como el de Sy Abelman, el amante de la esposa de Larry, que se sale un poco de la norma.

Viudo desde hace tres años, Mary Zophres explica que es un hombre que ha vivido un poco más que los demas y que por eso se permite el lujo de jugar un poco mas con su vestimenta.






El diseño de producción juega en la misma línea.

Jess Gonchor, el director de producción, fue hasta la casa en la que crecieron los Coen y el templo en el que fue su Bar Mitzvah.

Al final consiguieron un barrio por la zona, arrasado por un tornado hace cinco años (bastante irónico por otra parte), para que los Coen pudiesen plasmar sin cortapisas como era un barrio como aquellos hace ya 40 años.







La única excepción al look cuadriculado y pluscuamperfecto general fue la casa de la señora Samsky, la vecina cachondona de Larry.
Su casa es una explosión de color.
Como si supiera lo que estaba por llegar.



De una extraña manera, el fatalismo y las cuestiones de fe de toda la vida que son el centro de la película, me están haciendo pensar... y mucho mas fuerte todavía, me han hecho plantearme la posibilidad de ir a misa uno de estos días.

Curiosamente, la peli empieza con una cita de un rabino que dice: “Acepta con simplicidad todo aquello que te ocurra”.

Lo que me hace mucha gracia porque ser judío tiene pinta de ser de todo menos simple.

En cualquier caso a mi no me queda más remedio que hacerle caso.